El mantener un peso saludable podría reducir el riesgo de desarrollar algunos tipos de cáncer, incluyendo el cáncer de la mama, próstata, pulmón, colon y riñón. Los periodos de actividad física, además de ayudar a controlar el peso, por sí solos podrían reducir el riesgo de cáncer de mama y cáncer de colon. Los adultos que participan en cualquier cantidad de actividad física obtienen algunos beneficios para la salud. Pero para los obtener los beneficios sustanciales para la salud , se necesitan por lo menos 150 minutos a la semana de actividad aeróbica moderada o 75 minutos a la semana de actividad física aeróbica vigorosa, si así prefiere puede combinar ambos tipos de actividades. Se puede empezar haciendo 30 minutos de actividad física y si se puede más es mucho mejor.

4. Protección del sol.

El cáncer de piel es uno de los tipos más comunes de cáncer y el más sencillo de prevenir. Pruebe estos consejos:

  • Evita el sol del mediodía. No se exponga al sol entre las 10 horas y las 16 horas, que es el horario cuando los rayos del sol son más fuertes.
  • Permanezca en la sombra. Cuando esté al aire libre permanezca en la sombra tanto como sea posible. Lentes de sol y un sombrero de ala ancha también ayudan.
  • Cubra las áreas expuestas. Use ropa holgada que cubra la mayor cantidad de piel posible. Opte por colores claros que reflejen más radiación ultravioleta.
  • No escatime en la protección solar. Use una cantidad generosa de protector solar cuando esté al aire libre, y vuelve a aplicar frecuentemente.
  • Evite las camas de bronceado y las lámparas solares. Estas son tan perjudiciales como la luz solar natural.

5. Vacunas.

La prevención del cáncer incluye la protección contra ciertas infecciones virales. Hable con su médico acerca de la inmunización contra:

  • La hepatitis B. La hepatitis B puede aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de hígado. La vacuna contra la hepatitis B se recomienda para ciertos adultos de alto riesgo – como los adultos que tienen una vida sexual activa, pero no en una relación mutuamente monógama, las personas con infecciones de transmisión sexual, usuarios de drogas intravenosas, los varones que tienen relaciones sexuales con hombres, y la atención médica o el público trabajadores de seguridad que podrían estar expuestos a sangre o fluidos corporales infectados.
  • Virus del papiloma humano (VPH). El VPH es un virus de transmisión sexual que puede causar cáncer genital cervical y otros, así como cánceres de células escamosas de cabeza y cuello. La vacuna contra el VPH está disponible para los hombres y las mujeres de 26 años o menos que no tuvieron la vacuna en la adolescencia.

6. Revisiones médicas periódicas.

Hacerse regularmente evaluaciones médicas generales y exámenes de la piel, colon, próstata, cuello uterino y de mama pueden aumentar las probabilidades de descubrir el cáncer temprano y es más probable que se tenga éxito en el tratamiento. Pregúntele a su médico cuáles son los mejores estudios para una detección temprana.

Tome, a partir de hoy, la prevención del cáncer en sus propias manos. Los beneficios le durarán toda la vida.